El regalo de un anónimo

Gracias por el regalito, no está nada mal. Al de barbitas, Carlos Caballero, lo tenía a mi lado en el concierto de Madonna en barcelona, jajajja
Se admiten más regalos, todos serán bienvenidos.

2.000.000 de gracias

Sólo puedo decir eso, que muchas gracias a toda la gente que ha visitado este sitio en este tiempo. Me gusta pensar que gran parte de estas visitas han acabado en momentos de placer. Si una cuarta parte de las visitas han acabado en paja, significan 500.000 corridas. Emocionante pensarlo. No voy a dar más datos de cantidades, capacidades, tamaños, que esto podría acabar mal.
Lo que más me sorprende y toco madera, es que aguante sin que lo censuren. Hubo un día un susto que me hizo pensar que lo habían cerrado, pero se solucionó reactivando la cuenta. Después de todos los youtubes y dailymotions que me cerraron, sobrevivir en la red es un logro.
El blog ya veis que es muy básico, veo un vídeo que me gusta, un actor que me pone, una escena que me hace "acabar" y no puedo evitar compartirla con vosotros. Algún vídeo dedicado a amigos a los que no le gustan tanto los depilados cachas, alguno a quien le gusta Marco Blaze, muchos para los fans de Jean Franko, qué gran tipo, algún post (pocos) de protesta o de celebración, el lado de conciencia social lo he dejado un poco aparte para centrarme en el placer.
Si tuviera que agradecer y saludar me olvidaría de mucha gente. Pero hay un caso curioso y son dos chicas que me siguen, pro distintos motivos. La primera es una amiga de los tiempos de universidad que sabe que estoy vivo porque visita el blog, suena mal porque eso es que hablamos poco, pero al menos sabe de mi, un besazo Su. Y la otra chica es Eli, que le gusta lo que ve y lo mejor es que comenta, gracias guapa. Gracias a los seguidores por blogger y por facebook, a los de los chats y los colegas con blog. Y a vosotros, cuadrilla de salidos, que sigáis disfrutando y si hay peticiones, pues ya se verá si se atienden, jeje.
Y como despedida por hoy, como en los mejores programas, un refrito de viejos vídeos que han gustado especialmente, sobre todo a mi, jajaja.
Os deseo dos millones de pajas más.